Los ingleses, históricamente expertos en asuntos de piratería, emplean el término marooned para designar al que es abandonado a su suerte en un lugar inhóspito o desierto, preferentemente una isla. Los diccionarios etimológicos hacen derivar la palabra del español cimarrón ("silvestre, indómito, montaraz", según el Diccionario de Autoridades de 1726) o del francés marron, dos términos con los que se designaba a los esclavos (generalmente negros) que huían del látigo colonizador de sus amos (generalmente blancos) para vivir en libertad. Un célebre marooned fue Alexander Selkirk, que sobrevivió cuatro años en una isla desierta y en
quien se inspiró Daniel Defoe para su Robinson Crusoe (1719). Pero mi marooned favorito es, sin duda, Ben Gunn, el pirata a quien el capitán Flint abandonó en la Isla del Tesoro (1883), donde permaneció durante tres años, y que ocultó el cofre que buscaban a su vez sus antiguos socios, y el caballero Trelawney, el doctor Livesey, Jim Hawkins y todos los que se juntan en la isla.

No hay comentarios:
Publicar un comentario